"Llegué veinte minutos tarde a mi cita con el Detective Salvaje porque me pasé de largo un par de veces."
Jonathan Lethem
vuelve a publicar con Random House (2023) una novela de detectives. Si con Huérfanos
de Brooklyn consiguió el premio National Book Critics
Circle de 1999 teniendo como protagonista a un detective con el síndrome de
Tourette, ahora publica una extraña novela negra teniendo como protagonista a
un detective salvaje como indica el titulo,un tipo fuera de la sociedad,
aislado en una caravana más cerca por
dentro y por fuera del desierto que de la rutilante ciudad de Los ángeles.
A la puerta de
Charles Heist llega una periodista, Phoebe Siegle, para que encuentre a
Arabella, la hija de una buena amiga. A partir de aquí comienza un viaje que
los lleva de las afueras de la gran ciudad al desierto de Mojave. El humor, la
interacción sexual entre los personajes y la violencia que los rodea es sólo el
constructo del narrador para divagar acerca de cuestiones que atañen a los
americanos mucho más de cerca como es la era Trump y el ambiente político que
vive el país, siendo dos de las bandas que se enfrentan en el desierto (los
conejos y los osos) metáforas de los dos partidos que se enfrentan en las urnas.
Como he dicho, el
humor salvaje, la ironía y el alarde de
imaginación que va desgranando a lo largo de las doscientas noventa y cuatro páginas del libro
en este desierto casi apocalíptico me hace pensar que Lethem esta vez selo ha
pasado muy bien escribiendo su última novela.