"Los
entomólogos no lloran"
En el nuevo libro de Rosa Montero
(Seix Barral, 2022) la experiencia personal de la autora se mezcla con sus
lecturas, que es casi decir lo mismo, porque la vida de esta estupenda
escritora está marcada por una pasión singular por leer que la ha modelado personal y artísticamente.
El aluvión de datos que nos ofrece no es en absoluto
banal sino todo lo contrario, necesario para demostrar la tesis que subyace
bajo su documentada novela, y esta es la tesis de que la mente creativa es
diferente, es especial, desde un punto de vista biológico y filosófico. Como
digo, tantos datos no oscurecen la historia sino que ésta va avanzando entreverada
por ellos de forma natural y espontánea. La lectura es fácil y la pasión con
que escribe hace que no puedas desentenderte de su lectura por un instante.
La disociación que experimentan los
artistas y que los convierte en entomólogos de lo que ocurre a su alrededor es
una de las características de la mente creadora. También lo es el amor encendido,
la locura, la obsesión con el paso del tiempo y la muerte, el fingimiento (la
pesadilla de ser un impostor), el contacto temprano con la pérdida, las
adicciones para poder escribir, lo cual es su objetivo vital, la
hipersensibilidad sensorial y emocional o una predisposición a los trastornos
psiquiátricos.
Por sus páginas pasan sus escritores
favoritos, la ya conocida debilidad por Úrsula K. Leguin se muestra en las
continuas referencias a la escritora americana pero también a Doris Lessing, a
la que entrevistó como periodista de El País en su casa de Londres, a su
admirada Virginia Woolf o a la atormentada Sylvia Plath.
El libro está construido con la
agilidad y vehemencia a las que nos tiene acostumbrados Rosa Montero y en él
además se hace patente su interés por la neurociencia, la psicología o la biografía.
Es un libro que se mueve entre el ensayo y la ficción. Terriblemente adictivo, os
lo advierto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario